. me deslicé lo suficiente por la palma del mar
como para entender que leyendo en las olas
se ignora lo esencial
.no hay nada que conocer.
prefiero aferrarme al misterio que es esto.
alimentar lo incognoscible
como una piedra que rechaza el océano y corta el aire
por fin me rindo
al primer envión : al impulso que me vio llegar
y me hundo en el elemento
en el firmamento profundo
que me verá brillar
Nada como irse al centro, nada más intrigante que uno mismo. El resto... el resto es utilería, maquillaje y baratijas
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