(...)
esa nada misma, que
a mí me gusta llamar abismo, la asocio inseparablemente a la palabra
vértigo. al escopetazo de luz que rompe la continuidad de mi
mente .
.y es que ya no puedo diferenciarlas (vértigoabismo) porque voy al punto en el que las dos se interceptan.
.y es que ya no puedo diferenciarlas (vértigoabismo) porque voy al punto en el que las dos se interceptan.
. punto al que
tiendo .
. punto denso
gravitacional .
. centro de mi
existencia centrípeta .
(...)
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